El abogado Rafael Poblete, quien representa a las familias de los tripulantes de la lancha Bruma, ha actualizado a la opinión pública sobre la investigación del trágico naufragio de la embarcación. En declaraciones recientes, Poblete confirmó la detección de restos biológicos en la embarcación Cobra, que está siendo sometida a peritajes a raíz del incidente ocurrido. Estas afirmaciones emergen en el contexto de las diligencias realizadas en dique seco en Talcahuano, donde se han encontrado los indicios que podrían esclarecer más sobre lo ocurrido esa fatídica noche.
Según lo informado por Poblete, las muestras recogidas durante los peritajes llevaron a la Policía de Investigaciones (PDI) a remitirlas a cuatro laboratorios de Lacrim, destacando el de Temuco como el más avanzado del país. «Se nos indicó que los restos hallados no parecen ser de peces, lo que abre la posibilidad de que correspondan a restos humanos. Sin embargo, será necesario que las pericias lo confirmen o desmientan», comentó el abogado, subrayando la importancia de estos análisis en el proceso judicial.
Poblete también detalló que se estima un periodo de espera de entre diez días a dos semanas para obtener resultados definitivos de las pruebas realizadas en los laboratorios. Esta espera es crucial para las familias afectadas, quienes anhelan claridad sobre el destino de sus seres queridos. La angustia por la incertidumbre es palpable, y la búsqueda de respuestas se vuelve más intensa a medida que se conoce la naturaleza de los restos encontrados.
Además, el abogado manifestó su confianza en que pronto se romperá el pacto de silencio que ha rodeado a la tripulación de la embarcación Cobra. «Esperamos que se puedan obtener declaraciones que nos lleven a entender mejor lo que sucedió», añadió Poblete, resaltando que la transparencia y la colaboración de los involucrados son fundamentales para obtener justicia. La comunidad y las familias de los tripulantes están a la espera de un avance significativo en la investigación.
Por último, la situación ha generado un profundo interés mediático y un llamado a la sensibilización sobre la importancia de la seguridad en la navegación. El caso promete traer consigo no solo respuestas para las familias directas afectadas, sino también lecciones para mejorar las normativas y procedimientos en torno a la seguridad marítima. La determinación de Poblete y las familias de los tripulantes se mantendrá firme hasta que la verdad de lo ocurrido con la lancha Bruma salga a la luz.