Alejandro Hernández Toro, especialista chileno en reciclaje, explica en detalle cómo funciona esta ley y quiénes tienen la obligación de participar en ella.
La Ley 20.920 o Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP) es una norma que establece la obligación de los productores de ciertos bienes para hacerse cargo de los residuos de su comercialización.
Es decir, los fabricantes de los denominados “productos prioritarios” deben encargarse y administrar la correcta gestión de los desechos, desde la generación del producto hasta su eliminación.
Los productos seleccionados son: neumáticos, envases y embalajes, aceites lubricantes, electrodomésticos, pilas/baterías y, finalmente, diarios y revistas. Estos se escogieron debido a su enorme uso, su alto grado de contaminación, y peligro para la población y el medio ambiente.
Si bien esta norma se oficializó en 2021, a principios de este año comenzó a implementarse gradualmente, siendo los neumáticos el primer producto en estar bajo esta regulación. De la misma forma, los envases y embalajes también pasaron a ser materia de esta ley durante el mes de septiembre.
Alejandro Hernandez Toro, director comercial de Norte Verde SpA y experto en reciclaje, comenta: “La ley REP es un desafío para todos los actores involucrados en el ciclo de vida de los productos prioritarios. Para adaptarnos a esta ley, debemos mejorar nuestros procesos, capacidades y tecnologías, y cumplir con las normas sanitarias, ambientales y laborales que se requieren”.
¿Qué empresas deben cumplir esta norma?
Según detalla Hernandez Toro, quienes están regulados por la ley REP son principalmente los fabricantes de productos prioritarios, y en general aquellos que introducen estos productos al mercado, con su marca.
No obstante, la ley especifica en su segundo artículo lo siguiente: “El que contamina paga, el generador de un residuo es responsable de éste, así como de internalizar los costos y las externalidades negativas asociadas a su manejo”
Además, la ley también contempla otros actores que pueden participar del proceso de revalorización de los desechos, estos son:
- Sistemas de gestión
- Gestores de residuos
- Consumidores
- Consumidor industrial
- Municipios
- Ministerio del Medio Ambiente
- Superintendencia del Medio Ambiente
“La ley REP es un fuerte compromiso con el medio ambiente y la economía circular. Sin embargo, esta es transversal y no depende únicamente de los fabricantes de estos productos. Las distintas instituciones, consumidores y encargados de residuos deben sumarse y respetar esta nueva norma”, indica Hernández.
¿Qué arriesgan los que no cumplen esta ley?
Las sanciones por incumplimiento de la Ley REP en Chile son bastante severas y están destinadas a garantizar que los productores e importadores cumplan con sus responsabilidades. Las sanciones pueden variar dependiendo de la gravedad de la infracción.
Las multas pueden oscilar entre 1 mil y 10 mil UTA (Unidad Tributaria Anual). Además, se pueden aplicar otras sanciones como la amonestación por escrito, la revocación de la autorización del sistema de gestión, la prohibición para la venta de productos sin un gestor asociado y la publicidad de las infracciones.
Algunos ejemplos de infracciones que pueden resultar en estas sanciones incluyen:
- No inscribirse en el registro.
- Que el sistema de gestión no esté autorizado.
- Entregar información falsa a la Superintendencia o al Ministerio.
- No facilitar el informe final de metas de recolección y valorización de residuos.
Es importante destacar que estas sanciones son aplicadas por la Superintendencia del Medio Ambiente, que tiene la competencia para fiscalizar y sancionar las infracciones. Por lo tanto, es crucial que los productores e importadores comprendan sus responsabilidades bajo esta ley y tomen las medidas necesarias para cumplir con ellas.
Acerca de Alejandro Hernández Toro
Alejandro Hernández Toro es un emprendedor chileno que se dedica al reciclaje de metales desde hace más de dos décadas. Su pasión por este rubro nació desde su adolescencia, cuando ayudaba a su padre y a su tío en el negocio familiar de reciclaje de cartón.
Con el tiempo, fue adquiriendo experiencia y conocimientos sobre las distintas formas de dar nueva vida a los materiales desechados.
Actualmente, Alejandro es director comercial de Norte Verde SpA, una empresa dedicada a la recuperación de metales que exporta sus productos a países como China, Corea del Sur, India y Estados Unidos, entre otros.
Con Norte Verde, Alejandro busca contribuir al cuidado del medio ambiente y al desarrollo sustentable del país, aprovechando los recursos que otros desechan.
